Quisiera detenerme en un tema que a tocado mi puerta más de alguna vez y que en hoy toca la puerta de unos conocidos.
Perder a un ser querido, en el sentido de que no volveras a verlo nunca más, es fuerte. Es algo tan dificil de explicar con palabras que solo lo pueden comprender las personas que han pasado por esa situacion. A mi me tocó hace algunos años atrás, algo que es imposible de olvidar y dificil de asimilar. Porque somos seres humanos y es imposible olvidar a esas personas que dejan huella en uno de una u otra manera. Esas tardes de sol o dias de lluvia que no supimos apreciar en su momento, pensando en que volverian a repetirse más adelante. Pero llega un momento en que la vida se detiene y nos obliga a parar a nosotros tambien. Es en esa instancia donde nos damos cuenta de todas las cosas valiosas que vivimos y no supimos apreciar. Cada dia es un regalo del cielo, que pese a ser bueno o malo, nos enseña algo nuevo. Muchas veces el agitado ritmo de la vida nos ciega a descubrir ese tesoro, y cuando nos damos cuenta ya es demasiado tarde.
Por eso yo trato de ser lo más sincera posible, decir lo que siento, lo que me gusta o no me gusta. Expresarle a la gente que quiero lo mucho que me importan, hacerlo saber. No hay que dar las cosas por obvias. Siempre es gratificante escuchar de un ser querido un te quiero sincero o recibir un abrazo apretado. Esas pequeñas cosas no tienen precio.
Gracias a todos mis seres queridos( amigos, familia, etc.), a los que siempre estan ahi apoyandome en todo momento. Y tambien a los que me estan viendo desde otro lugar, saben cuanto los amo.
lunes, junio 30, 2008
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario